Marruecos ha sido, para mí, toda una sorpresa. El viaje me ha encantado. De hecho, creo que me ha gustado más de lo normal. Estoy deseando volver. Un viaje por Marruecos es un viaje experiencial. Un viaje para sentir, ver y, sobre todo, para perderse. Y a mí, ese tipo de planes me encantan. En este post te cuento todos los detalles de mi reciente ruta por el norte de Marruecos en cuatro días, para que te animes a ir a este país que es una auténtica caja de sorpresas.
Viaje al norte de Marruecos en cuatro días
En resumidas cuentas, el plan de viaje y la distribución de los días es el siguiente:
Día 1: Vuelo Madrid- Tánger. Tarde en Tánger.
Día 2: Tetuán.
Día 3: Chefchaouen.
Día 4: Asilah.
Día 5: la odiada vuelta a casa Tánger-Madrid. 🙁
¿Cómo llegar al Norte de Marruecos?
Estas son las opciones de transporte que tienes para planear una ruta por el Norte de Marruecos:
- Opción A: en avión.
Puedes llegar a Tánger en avión con la compañía low cost Ryanair directamente desde Madrid u otras ciudades de España. La duración del trayecto es poco más de una hora de vuelo. Además, si coges el vuelo con bastante antelación suele estar bastante barato. Te recomiendo que busques vuelos baratos en el buscador skyscanner.
- Opción B: en barco.
Si lo deseas, también puedes llegar a Tánger en ferry desde Algeciras en un trayecto de una hora y media. Esta opción es buenísima si quieres aprovechar a llevarte tu propio coche en el ferry y hacer una ruta por Marruecos. Para buscar horarios y opciones te recomiendo mi buscador de ferry favorito Ferryhopper.
¡MUY IMPORTANTE! Seguro de viaje imprescindible para viajar a Marruecos
¡Ni se te ocurra viajar a Marruecos sin un buen seguro de viaje! Marruecos no es Europa, y por ello la Tarjeta Sanitaria Europea no te vale absolutamente de nada. Imagínate que de repente te tienen que ingresar en el hospital o tienes que regresar a casa por una emergencia. ¿Cómo podemos evitar todas estas desgracias? Contratando un buen seguro de viaje que pague todos estos gastos por ti sin tener que adelantar ni un euro.
Nosotros te recomendamos el seguro de viajes Heymondo. Tienen la mejor relación calidad-precio del mercado, con unas coberturas brutales y un chat médico donde te atienden en español las 24 horas del día. Para un viaje a Marruecos te recomiendo la póliza Viaje Tranquilidad e incluir también el servicio anulación (estarás cubierto ante 42 posibles causas). ¡Y lo mejor de todo es el precio! Las mejores coberturas por menos de lo que cuesta una caña al día. Además, tengo para ti un 5% de descuento si contratas el seguro desde este enlace. No lo querrás desaprovechar, ¿verdad?
¿Cómo moverse por Marruecos?
Yo me moví únicamente en taxis compartidos, los Grand Taxis. ¡Son baratísimos! Estoy hablando de unos 3 euros por hacer un trayecto de una hora larga. Eso sí, para que te vayas haciendo a la idea, te aviso un poco de cómo son los taxis en Marruecos:
- Dos personas van en el asiento del copiloto. Si, has leído bien, dos.
- Cuatro van en la parte de atrás.
- Prometo que nadie va en el maletero. 🙂
- Olvídate de la palabra "cinturón de seguridad" durante el trayecto. Esa palabra no existe en el diccionario marroquí.
- Una vez montado en el taxi, esperas a que se ocupen todas las plazas. No sé si yo tuve demasiada suerte, pero nunca tuve que esperar más de cinco minutos a que el taxi se completase.
- Si lo deseas, también puedes comprar las plazas del taxi que queden libres y así no vas tan arrejuntado. 😉
A no ser que lleves tu propio coche o te alquiles uno, mi recomendación es que te muevas en taxi. Es barato y cómodo (bueno, lo de cómodo, depende de cómo de grande sea el culo de tus compañeros de trayecto 😛 ).
También puedes moverte en bus, pero no te creas que vas a ahorrar grandes cantidades de dinero respecto al taxi. Además, yendo en bus sabes a qué hora sales, pero no a la qué vas a llegar. Ya sabes, todo forma parte de la aventura marroquí.
Ruta por el norte de Marruecos en 4 días
A continuación te voy a contar en detalle como fue nuestro viaje por el norte de Marruecos, donde nos alojamos, restaurantes recomendados y mucho más.
Día 1: Tánger
Tánger me encantó. No me dio tiempo a conocerla en profundidad, ya que el avión llegó tarde y al día siguiente tenía que partir hacia Tetuán, pero mi recomendación es que le dediques al menos un día o una tarde. No te pierdas todas las razones por las que te recomiendo visitar Tanger un día.
Tánger es una ciudad multicultural y pasear por la medina de Tánger es toda una experiencia. Quizás la medina no es tan bonita como la de otras ciudades del norte de Marruecos, pero me pareció muy viva y auténtica. Además, me gustó el choque cultural que supone la ciudad como primer contacto con Marruecos.
Aviso a navegantes:
Tánger fue la única ciudad de Marruecos en la que me avisaron, directamente en el hotel, que había que tener especial cuidado por la calle con los objetos de valor, carteras, bolsos y móviles. Yo no tuve ningún problema y me sentí igual de segura que en España, pero si desde el hotel avisaron por algo será.
Cuando yo estuve, coincidió que era justo el último día del ramadán, y la medina estaba a rebosar de gente. Los siguientes cuatro días iban a ser festivos y la gente aprovechaba a hacer las compras de última hora. Sí, cuatro días de fiesta, para que luego digan de los españoles. 🙂
Alojamiento en Tánger recomendado
Me alojé en el Hôtel Rembrandt. El hotel es barato, está a pocos minutos andando de la medina de Tánger y, además, ¡tiene piscina! Para comer te recomiendo el Restaurante Comedia, está muy cerca del Hôtel Rembrandt y tiene mucha variedad de comida y a buen precio.
Día 2: Tetuán
Desde que me compré los vuelos todo el mundo me recomendó incluir Tetuán en el itinerario de la ruta por el norte de Marruecos. Es una ciudad muy genuina y muy ligada a España.
Además de ser la antigua capital del protectorado español en Marruecos, me despertaba especial curiosidad visitarla después de haberme tragado con palomitas toda la serie de "El tiempo entre costuras". Serie ambientada en Tetuán y basada en la exitosa novela de María Dueñas. Por cierto, si aún no has visto la serie o no te has leído el libro no sé a qué estás esperando. A mí no me gustan nada las series españolas, pero esta me requete-encantó.
 Lo mejor de Tetuán es que es una ciudad súper auténtica. Perderse por los barrios de la medina es todo un espectáculo de colores y olores (y a veces olía mal ¡eh! Todo hay que decirlo). El barrio de los curtidores, la cooperativa, el arte del regateo, ver que la ciudad está repleta de gatos por todas las esquinas. A mí me encanto. Y sin apenas turistas. Más me gusta todavía.
Otro punto por el que considero imprescindible una visita a Tetuán es su estrecha relación con España. Verás muchos guiños a España por toda la ciudad y no tendrás problema en encontrar a gente que hable español. De hecho, casi todo el mundo habla español tanto en Tetuán como en todo el norte de Marruecos.
¿Dónde dormir en Tetuán y dónde comer?
Para dormir en Tetuán te recomiendo el Riad Dari, está dentro de la medina y la dueña no puede ser más maja. Además, habla un perfecto español y los desayunos desde la terraza son una maravilla.
Para comer te recomiendo el restaurante El Reducto. La comida está bastante bien, tiene wifi y, además, el restaurante cuenta con licencia para vender alcohol, algo muy apreciado para los adictos a la cerveza como yo. Vamos, que de ahí casi no me muevo en toda la tarde. Con cerveza, whatsapp y comida rica ya tengo suficiente. 🙂
¿Cómo llegar a Tetuán? Puedes llegar a Tetuán desde Tánger en taxi compartido por el módico precio de 30 dirhams por persona, es decir unos 3 euros. El precio del taxi está ya fijado, por lo que no necesitas regatear. La duración del trayecto es de una hora y diez minutos.
Día 3: Chefchaouen
Chefchaouen es la joya de la corona en cualquier viaje por el norte de Marruecos. Es uno de los lugares más bonitos que he visto en mi vida. No puede ser más fotogénico el pueblo. Todas y cada una de las esquinas de Chefchaouen te dejarán embobado. Además, el pueblo está muy bien cuidado. Una sola foto bastará para darte cuenta de que tiene un encanto muy especial.
En Chefchaouen solo ves azul por todas partes. Y el azul ME ENCANTA. Solo por ver este pueblo pitufo merece la pena todo el viaje al Norte de Marruecos. Si quieres saber más acerca de la ciudad pitufa de Marruecos no te pierdas este post con todo lo que tienes quer ver en Chefchaouen. Para mí es un lugar imprescindible que ver en Marruecos. Además, tienes que tener en cuenta que queda cerca del norte de Marruecos, pero a desmano de otros lugares turísticos de Marruecos, por lo que la mejor opción es llegar aquí desde Tetuán.
¿Dónde dormir en Chefchaouen y dónde comer?
Yo hice una excursión a Chefchaouen de un día y regresé a dormir a Tetuán, pero si decides quedarte a dormir allí te recomiendo el Riad Cherifa.
Para comer te recomiendo el restaurante Casa Aladín. Es un restaurante de varias plantas que está decorado, como bien indica el nombre, como si acabases de aterrizar en el plató de rodaje de la película Aladín. Además, tiene unas vistas flipantes a la Plaza Uta el-Hamman y a todo el pueblo.
¿Cómo llegar a Chefchaouen? Llegué a Chefchaouen desde Tetuán, en el bautizado "taxi de la muerte". Casi veo pasar la muerte ante mis ojos. El taxista era algo temerario con los adelantamientos, pero sin cosas como esta luego no tendría anécdotas para contar a mis nietos, ni a vosotros. El precio del taxi fue 35 dirhams, y el trayecto duró una hora y media, más o menos. La vuelta, afortunadamente, fue mucho más tranquila.
Día 4: Asilah
Si Chefchaouen era la joya de la corona, Asilah tampoco se queda corta. Asilah, en español Arcila, es sinónimo de mar, de encontrarte dromedarios en la playa, de casas blancas y de surf. De hecho, me recordó, en cierto modo, a la arquitectura de los pueblos de Andalucía.
La medina de este pueblo está también muy bien cuidada. Y ver atardecer desde la zona de Krikia justo en las murallas, rodeado de gente local, fue simplemente alucinante. Si quieres saber más sobre Asilah te recomiendo este post en el que te cuento todo lo que tienes que ver en Asilah.
Por recomendación de una amiga, aproveché para escaparme un ratillo a la Playa de las Cuevas, uno de los tesoros que esconde Asilah. La playa me recordó un poco a las playas del norte de España. Salvaje, pero con un tono de arena más dorada. ¡Ah! Y los camellitos paseando por mitad de la playa son muy adorables, hasta que me di cuenta que había pisado caca de camello. Dicen que da suerte, ¿no?
Alojamiento en Asilah recomendado Te recomiendo el Hotel Al-Alba. Está bastante céntrico, está decorado muy mono y está ubicado a menos de 10 minutos andando de la medina, y a menos de cuatro minutos de la playa.
¿Cómo llegar a Asilah? Puedes llegar a Asilah en taxi desde Tetuán por 50 dirhams, negociándolo antes previamente con el taxista.
Y este es el resumen de mi ruta por el norte de Marruecos. Ruta de la que he venido enamorada.
Si tienes pensado ir a Marruecos mi recomendación es que no te lo pienses más. Vete con los ojos cerrados. ¡Te va a flipar!
Si tienes alguna duda sobre el viaje no dudes en dejarme un comentario al final del post. Y si quieres ver más fotos del viaje te recuerdo que puedes seguirme en instagram. Cada día por la noche subo una foto diferente de mis viajes. Y de Marruecos tengo muchas y muy bonitas.
¿Qué te ha parecido mi ruta por el Norte de Marruecos? ¿Tienes ganas de ir?
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Las ciudades que más nos gustaron del norte de Marruecos han sido Chefchaouen, Asilah y Tetuán. Tánger también es interesante pero no tiene el mismo encanto de las otras ciudades que te acabo de mencionar. Y, de todos ellos, Chefchaouen es el pueblo más bonito del norte de Marruecos. Tiene un encanto especial al ser todo azul y es uno de los lugares más fotogénicos del mundo.
Si eres mujer y viajas a Marruecos que sepas que deberías seguir unos ciertos códigos de vestimenta. Por ejemplo, evita los pantalones cortos o minifaldas, especialmente si viajas sola. También si vas en verano te recomiendo que lleves los hombros tapados, es mejor llevar maga corta y evitar los tirantes con escote. En cuanto al velo no es necesario en ningún momento en Marruecos, salvo que tengas que entrar a alguna mezquita.